February 2, 2014



El día que te alejaste, sentí vértigo etéreo.

La piel se disolvió, la mente se desgarró, los ojos todavía se inundan,

eras celeste y aéreo,

Pupilas plagadas de tormentas, las pestañas ya desbordan.


Desde aquí; saltar, desistir, desvanecer,

y huir.

O quizá aprisionarme a tu inclinación,

y seguir.

No comments:

Post a Comment